6.4. Elección del sistema de conducción.
Bibliografía consultada:
HIDALGO, L., 1993. Tratado de viticultura general. Ediciones
Mundi-Prensa. 983 pp.
HIDALGO FERNANDEZ-CANO, L., 1997. El modelo chileno para la
producción de uva de mesa de la más alta calidad. Viticultura/Enología Profesional,
50, pp. 48-52.
NOGUERA PUJOL, J., 1980. Viticultura práctica. Ediciones
Dilagro. 370 pp.
PEREZ CAMACHO, F, 1992. La uva de mesa. Ediciones Mundi-Prensa.
153 pp.
ROMAN, A., 1997. El cultivo de la uva de mesa con sistema de
emparrado en Y. Cuadernos de Fitopatología. Revista de fitopatología y entomología,
pp. 7-8.
CORONADO SEVILLA, J. A., 1997. Uva de mesa. Infraestructura de
cultivo. Cuadernos de Fitopatología. Revista de fitopatología y entomología, pp.
4-6.
Información privilegiada:
LOPEZ ANDREO, J.R., 1999. Técnico de ATRIA de uva de mesa.
LOPEZ GONZALEZ, A., 1999. Técnico de TAQUIMSA.
MAXIMO, A., 1999. Técnico de ATRIA de uva de mesa.
El sistema de conducción, establecido a priori, condiciona desde el
principio todo el proceso de la plantación y su futuro resultado.
En la Región la única y más difundida forma de conducción de la uva
de mesa es el parral, salvo algunas excepciones. No obstante para la obtención de la uva
de mesa de calidad "no solo existe el parral", hay muchos otros sistemas de
conducción como pueden ser la espaldera alta y la Y.
Estos tres sistemas de conducción, parral, espaldera e Y, aglutinan la
esencia de los muchos utilizados, que pueden agruparse por la disposición de la
vegetación en la forma horizontal, vertical e inclinada.
6.4.1. Conducción en parral.
La vegetación queda en posición horizontal y paralela al terreno.
Su estructura básica queda definida, a una altura de aproximadamente
2,10 m, por la disposición de alambres horizontalmente en dos ejes, entrecruzándose y
formando una malla de 0,5 x 0,5 m.
Sus ventajas más destacables: muy longevo, perfecta capacidad
de aprovechamiento de la luz por parte de las hojas (con una superficie foliar de
alrededor del 100% con respecto al suelo), posibilidad de obtener una gran producción de
excelente calidad (variedades blancas), buena manipulación, distribución y recolección
de racimos; menor incidencia de heladas, baja presencia de malas hierbas y buenas
condiciones para los tratamientos en general.
Sus inconvenientes más destacables: no es apto para terrenos
con mucha pendiente (necesita creación de terrazas), elevado coste de instalación, mayor
carga de las cepas, menor aireación e iluminación de los racimos, retraso en la
maduración y menor coloración (variedades rojas y negras), mayor necesidad de mano de
obra para las labores y menores posibilidades de mecanización.
Si se analizan detenidamente tanto sus ventajas como sus
inconvenientes, se llegan a las siguientes conclusiones: es un sistema adecuado para
el cultivo de variedades blancas, tanto tempranas como tardías; es el más conveniente
para la producción de variedades tardías a muy tardías rojas o negras; y para el
cultivo de variedades con problemas de asurado o en zonas donde la insolación excesiva
pueda dañar las bayas también es el mejor sistema.
Este sistema de conducción permite la instalación de plásticos para
adelantar la maduración y mejorar las condiciones del cultivo.
6.4.2. Conducción en espaldera alta.
La vegetación queda verticalmente con respecto al suelo, con lo cual
su mejor orientación se consigue situando las líneas en la dirección norte-sur, con el
objeto de aprovechar mejor la luz del sol, aunque en terrenos con mucha pendiente se deben
seguir éstas.
Su estructura básica queda definida por la disposición vertical de
alambres (normalmente 3) unos sobre otros, en donde el primero se sitúa a 60-80 cm del
suelo y los demás a una separación variable de entre 25 y 50 cm, variando así su altura
total.
En Alicante este sistema de conducción esta ganando terreno a la
tradicional espaldera baja, debido a que consigue mayor captación de luz y por tanto
mejor producción de uva, así como más comodidad en el trabajo (CORONADO SEVILLA, J. A.,
1997).
Sus ventajas más destacables: apto para terrenos con pendiente,
menor coste de instalación, menor carga de las cepas, mayor aireación e iluminación,
mejor coloración de las bayas (variedades rojas o negras), mayor adelanto de la
maduración, mayor fertilidad, mayor facilidad de recolección, más fácil de mecanizar,
mayor facilidad y rapidez de las labores de cultivo y menos necesidad de mano de obra.
Sus inconvenientes más destacables: menor longevidad, capacidad
media de aprovechamiento de la luz (máxima superficie foliar de entre el 70 y 80 % con
respecto al suelo, variable según el marco), menor producción, menor tamaño de racimo y
baya, menor calidad, menor facilidad de manipulación y distribución de racimos, mayor
presencia de malas hierbas (sobre todo con riego localizado) y mayor problemática por la
aplicación de herbicidas (riesgo de manchado de racimos).
Si se analizan detenidamente tanto sus ventajas como sus
inconvenientes, se llega a las siguientes conclusiones: es el sistema más conveniente
para el cultivo de variedades tempranas, rojas y negras, así como las blancas; es el
idóneo para grandes superficies y terrenos en pendiente. No obstante en Alicante la
espaldera se utiliza ampliamente junto con el parral para la producción de las variedades
Italia y Aledo, siendo está última muy tardía.
6.4.3. Conducción en Y.
La vegetación queda inclinada con un ángulo de 45 º sobre la
horizontal del terreno. Su mejor orientación se consigue situando las líneas en la
dirección norte-sur, con el objeto de aprovechar mejor la luz del sol. En terrenos con
mucha pendiente se deben seguir éstas.
Su estructura básica queda definida por la disposición de dos grupos
simétricos (eje vertical) de alambres paralelos entre sí y sujetos a los brazos de la Y.
El inicio de los brazos está situado a 1,2 m sobre el suelo, la parte final a 2,10 m, y
su longitud es de 1,25 m.
Se trata de un novedoso sistema, intermedio entre el parral y la
espaldera, que está empezando a ser utilizado en Alicante para el cultivo de la uva de
mesa.
Sus ventajas más destacables: Aúna las ventajas de las
conducciones en parral y espaldera alta; lo más destacado es que presenta una superficie
foliar de hasta el 120 y 125 % con respecto al suelo y teóricamente más producción por
hectárea (ROMAN, A., 1997).
Sus inconvenientes más destacables: No se le conocen
inconvenientes destacables.
Si se analizan detenidamente tanto sus ventajas como sus inconvenientes, se llega a
la siguiente conclusión: Aúna la idoneidad de la conducción en parral y de la
conducción en espaldera alta. |